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6.1.08

las palabras de 2007

facebukear, Paseo Caribe, pepper spray...y como no, kayak (!). vea en La Revista la columna de Maia Sherwood y Marilola Pérez, donde seleccionan nuestras palabras del 2007. a continuación algunas:

Maia:

Partidocracia - (Etimología: de “partido” + “-cracia”, elemento que significa dominio o poder). Sustantivo femenino. Sistema en que los partidos tradicionales, en coligación, han monopolizado la participación política y económica en el País, y que comenzó a derrumbarse irremediablemente con la inscripción ciudadana de un nuevo partido de base social y ambiental.

Gran jurado - Frase nominal. Grupo de dieciocho ciudadanos elegidos al azar que tienen a su cargo evaluar las investigaciones de los casos criminales en el Tribunal Federal y determinar si hay causa probable. Nota de uso: esta frase, que evocaba algo análogo al Juicio Final para muchos, ha perdido su aire intimidante para convertirse en frase cotidiana como consecuencia de la altísima frecuencia de uso requerida este año.

Paseo Caribe - Nombre propio. Estructura monolítica de orígenes extremadamente problemáticos que, cual castillo medieval, propone encerrar en su seno a un exclusivo puñado de personas, a la vez que cierra la vista al mar y limita el acceso a estructuras históricas a la ciudadanía en general. Nota de uso: su nombre resulta en un acertijo, pues a la vez que impide cualquier Paseo, también cancela cualquier contacto con el Caribe.

Marilola:

Facebukear - (bostezo) Lo sé, en el 2007 se ha hablado de este fenómeno ad náuseam. Que si una red social en el ciberespacio, que si todo el mundo se pasa conectado, que si descubrimos secretos expuestos en el ciberespacio… La realidad que es que casi todos facebukeamos. Yo facebukeo y facebukeé a la mitad de mi clase de cuarto año. Ella facebukeó a su jefe para reírse de sus fotos de La Parguera en las que sale con la panza al aire y una gorrita con el Pato Donald tapándole la calva. Él facebukeó a la muchacha que conoció en el ‘licuol’, y tú ya no te dejas tomar fotos no vaya a ser que te facebukeen.

Cafre - De origen ochentoso, esta palabra se usaba originalmente para definir todo aquello asociado a lo boricua-kitsch. Poco a poco, a medida que el País completo se cafretizaba, la palabra se volvió innecesaria y su uso apenas subsistía entre niñas esnob del área metropolitana. Sin embargo, una vez más tenemos que darles las gracias a nuestros senadores por el favor que le han hecho a nuestra lengua, al no dejar que tan rico vocablo desaparezca del español boricua. En específico hay que darle las gracias a quien no dudó al llamarles ‘cafres’ a todos aquellos que se colocan en protesta frente a la construcción de Paseo Caribe. Gracias a la labor encomiable de Jorge de Castro Font, la palabra ha vuelto a ser usada como epíteto entre personas mayores de 8 años.

Pepper spray / peppel ejprei / pepelprei - Escoja la pronunciación que quiera, que nuestras mentes son amplias y podemos reconocer cualquiera. Me pregunto si la Miss adobada en pimienta cambia la pronunciación de la palabra dependiendo del lugar donde la diga. O si siempre pronuncia la palabra como la escucharon decir en un perfecto inglés en un programa norteamericano al que acudió a relatar su infortunio. Por otro lado, me imagino que Magali Febles dice peppel ejprei, por aquello de que no es ni Miss ni pueblo: ella es un ente en sí mismo o, como diría una amiga para evitar que la culpa la carcoma cada vez que chismea de alguien, Magali ha dejado de ser persona y se ha convertido en un “concepto”. De hecho, concepto extraño debe ser el de una puertorriqueña en la fila del banco, a la cual le escuché decir que “a la miss le echaron ‘pepper steak’ en el traje”.

Kayak - Esta palabra sí que ha evolucionado. De origen inuit, la palabra se refería inicialmente a esas canoítas que se usaban allá arriba donde hace frío para moverse de pedazo de hielo a pedazo de hielo. Jamás se imaginó Amorak que, en una isla del Caribe, en el 2007, el barquito se usaría como símbolo principal de la creatividad y la solidaridad que todavía, a pesar de años de ininterrumpidas agresiones a su dignidad, sobrevive en muchas de las personas que viven en nuestra Isla.