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18.6.09

Cámara y Senado (update) aprueban proyecto contra el Caño

La Cámara aprobó esta noche el P. de la C. 1403 (update: al día siguiente el Senado lo aprobó), con enmiendas (Vea nota aquí). Es básicamente el mismo proyecto pero se hace aún más explícito lo que se persigue, obviamente desmantelar el fideicomiso y revertir el poder al Municipio para continuar medidas clientelistas. Directamente se revierte la titularidad de los terrenos que pasaron desde el 2005 al Fideicomiso, pero en este proyecto no solo se revierten los del Municipio, sino todos, e incluso se traspasan los del estado al Municipio, se invalidan las inscripciones en el Registro de la Propiedad que se hicieron desde el 2005, se retrotrae la vigencia de este proyecto al 2004, se dispone para otorgar títulos individuales tal y como están ahora mismo, en fin, en su día pondremos el análisis legal que esbocemos. 

No fue fácil. Esta vez hubo debate, pero fue tan patético que ni se bien como reseñarlo. La retórica utilizada por Nuno López y el resto de mayoría fue que el propósito del proyecto es ''hacerle justicia social' a las comunidades que tanto han sufrido. Albita Rivera llegó al punto de decir que lo que se buscaba con el proyecto era evitar el desplazamiento que habían sufrido las comunidades de Antonsanti y Alto del Cabro de Santurce y las antes desplazadas Fanguito y Tokio. Así es. La palabra 'justicia social' fue vaciada de contenido allí. Quedó fuera del lenguaje. Me quedé sin vocabulario, lo arrebataron, lo re-significaron. Y escuchándolos yo no podía sino pensar que en serio debían creerse lo que estaban diciendo porque parecían genuinamente convencidos de la gran gama de disparates -tanto jurídicos como socio-históricos y de hechos y datos sobre el Caño y el Fideicomiso- que exponían con un histrionismo pasmoso. El Alcalde envió su gente y empleados a las gradas y por supuesto, no falto el aplauso al representante Nuno López. La gente del Caño observaban atónitos nuevamente. Parecía una mala orquesta esa del hemiciclo, pero con un desafino y desatino tal que daba verguenza ajena. Pasmoso. 

Más allá de eso, adelantamos las serias fallas jurídicas que tiene el proyecto, lleno de contradicciones, premisas falsas y con asuntos que según vemos son inconstitucionales. Ahora los ojos pasan a La Fortaleza. Esperemos que haya luz.