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2.9.16

Protesta contra Promesa

31 de agosto de 2016

Lo que se protesta hoy en Puerto Rico, con toda la razón del mundo, se ha denunciado y protestado a nivel global, en campañas, en manifestaciones, en cine y documentales, en la literatura política y económica: este esquema de acreedores globales contra países y poblaciones es corrupto, perverso, inmoral, mezquino y debe derrotarse porque mantiene el control de las vidas de la mayoría del planeta. 

Y Nosotros también ahora debemos denunciarlo porque se nos ha materializado burdamente a través de una ley llamada PROMESA, hecha a la medida únicamente para acreedores, una ley propia del ámbito civil-patrimonial que transfiere nuestros bienes comunes, nuestras posibilidades futuras, a ciertos patrimonios privados, a bancos, a oportunistas financieros. Y desde la supremacía de esa ley se pretende regir nuestra vida colectiva, nuestra ciudadanía, nuestros derechos civiles, políticos, sociales, económicos y culturales pues está por encima incluso de nuestro ya de por sí débil esquema constitucional.

En otras palabras, hay que decirle al mundo que nosotros también hemos sido y somos víctimas de este esquema económico inmoral que se tragó todo atisbo de posibilidad política y unirnos a las voces que lo protestan a nivel mundial. Decir contundentemente que Puerto Rico también lo cuestiona y que nos negamos a ser súbditos de los bancos y firmas que han aprovechado inmoralmente el orden de cosas que provoca este esquema para su riqueza infinita y privativa.

Estos que se reúnen hoy y que se aprovechan de este esquema son los bancos, empresas y firmas que se han posicionado como acreedoras de nuestra democracia.

(Foto del Centro de Periodismo Investigativo)